Es el hábito de dejar para mañana tus actividades, evadirlas, ocultarlas, dejarlas guardadas para otro momento, no enfrentarlas, es decir: postergarlas, procrastinarlas.
Hacer esto produce culpa, miedo, estrés, malestar, incomodidad, inseguridad, remordimiento, angustia y ansiedad.
No enfrentar cosas nuevas es una forma de autoprotección para no salir de lo familiar, de la zona de confort. En esta zona estas cuando te mueves en un entorno que dominas, en ella las cosas te resultan conocidas y cómodas.
Estamos continuamente recibiendo información consciente, e inconscientemente no damos importancia a lo que realmente tenemos que hacer y procrastinamos.
El neurocientífico Facundo Manes afirma que el cerebro humano es la estructura mas compleja del Universo… para funcionar bien necesita conectarse. Cuando no estamos haciendo nada el cerebro funciona mejor, es decir se da el tiempo para procesar aquello en lo cual se estuvo atento.
Por eso ya sabes , no dejes para mañana…..no procrastines.